Querida futura media naranja:
Sé que
igual todo esto es un poco precipitado, pero un día sabrás que anticiparme es
mi obsesión preferida. Te escribo esta carta porque quiero decirte unas cuantas
cosas antes de que nos conozcamos, porque ya sabes, a veces la costumbre se
olvida de las cosas más importantes.
Hace días
que pienso en las cuatro cosas que sé de ti, pero, por favor, no te enfades si
me equivoco, pues es lo que tiene el querer ir siempre dos pasos por delante
del presente.
Quiero
decirte que sé que eres tal cual a como siempre te había imaginado, incluso
mejor. Eres todo lo que siempre he querido a mi lado, todo de lo que me va a
ser imposible separarme.
Sé que te
va a hacer gracia que me enfade por tonterías, porque sabrás que si a veces soy
idiota es porque mi mayor temor va a ser que descubras todo lo que no te gusta
de mí y que decidas que ya no soy todo lo que tú eres para mí. Y te pido perdón
por ello por anticipado, aunque te prometo que no hay día en que no luche por
dejar de pensar siempre que las cosas buenas no están hechas para mí.
Sé que
contigo voy a vivir todo lo que sé que quiero vivir, porque serás la única
persona en el mundo con sueños compatibles a los de una total e irreversible
romántica empedernida, enamorada de la vida solo si es como yo la quiero (pero de
ti siempre, por supuesto).
Sé que la
primera vez que te vea, voy a saber de inmediato que eres tú. Hasta a lo mejor
se me escapa un “por fin me has encontrado”, al rollo de The Fray, pero no pienses que estoy loca, solo será de la emoción,
la misma que debe sentir un pirata al encontrar un tesoro con el que lleva
tiempo soñando. Sé que va a ser como si te conociera desde siempre (y para
siempre).
Sé que me
estás esperando. Estás esperando a que esté preparada, a que haya dejado de
quedarme paralizada cada vez que piense en querer, en amor, amar, o cualquier
cosa relacionada. Sé que estás esperando a que te deje de tener pánico.
Sé que
estamos esperando a poder ser dos naranjas completas, y no solo media, para así
poder rodar juntas, que va a ser mucho más divertido y menos doloroso.
Sé que nos
estamos esperando, y, aunque no nos demos cuenta, sé que también nos estamos
buscando. Pero vive todo lo que tengas que vivir, siente todo lo que tengas que
sentir, haz todo lo que tengas que hacer para saber que ya no quieres hacer
nada más sino es conmigo. Yo te espero todo lo que haga falta, porqué sé que
todo lo que vale la pena, se hace de rogar. Pero por favor, no tardes mucho,
porque quiero que llegue un día en que en lugar de querer atrapar al futuro,
quiera que los días (contigo) no se acaben nunca.
Y, por si
no lo sabías, sé todo esto porqué es lo que me hace seguir adelante (con ganas)
y porqué, ahora mismo, es lo único que necesito (o quiero) saber.